La piel normal debe ser cuidada siempre, día y noche, con humectantes, la limpieza correcta, mascarillas, y otros. Pero cuando la piel es sensible el cuidado debe ser mayor aún. La piel sensible necesita un extra cuidado de nuestra parte.
La piel sensible por lo general se reseca con facilidad, tiene la disponibilidad de tener erosiones, acné, rosácea, dermatitis, alergias e irritaciones constantes también. Pero gracias al avance de la ciencia y la medicina puedes tener una vida normal si sigues una rutina llena de cuidados diariamente.
Consejos para tener una piel hermosa
Con tantos productos e información ahora los que tienen una piel sensible también pueden disfrutar de una piel sana y humectada. Pero para ello debes seguir los siguientes consejos sabios:
- No uses jabones cosméticos o que tengan fragancia. Esto puede maltratar mucho una piel sensible, busca más bien jabones que puedan tratar y proteger tu piel del alcalino y los alcoholes convencionales que tanto daño hacen a cualquier tipo de piel. Es altamente recomendable usar que contengan Karité. Usa cremas y humectantes que se adapten al mal de tu piel (acné, rosácea, etc.)
- No conserves maquillaje viejo, cambia cada seis meses tus cosméticos porque estos pueden provocar más problemas a tu piel sensible. Es mejor que al rostro le apliques polvos o siliconas en lugar de cremas o maquillaje cosmético, porque estos pueden obstruir los poros y maltratar tu piel.
- Alimentación, No solo debes cuidar tu piel externamente sino también debes evitar consumir ciertas sustancias o alimentos para tratar una piel sensible, por ejemplo debes evitar a toda costa el alcohol y cosas o comidas picantes. Esto influye en tu piel, por tanto debes evitarlo a toda costa.
- Evita cualquier producto que tenga alcohol convencional, fragancias, tintes, colorantes, detergentes fuertes.
- Protege tu piel sensible del sol con protectores solares y evitando contacto directo con el sol todos los días.